— La casa — A la memoria de Amelia Pereira vda. de Robatto Como un recuerdo firme y lejano quedó la casa de largos techos la galería de ventanales la mecedora de tantos sueños Quedó la alcoba disimulada con su escritorio y primeros versos la noche inquieta llena de encanto y el balconcito de los secretos La vieja torre del campanario fue tantas veces mano del tiempo la escalinata del viejo templo sintió sus pasos los míos cerca Vieja morriña de aquella casa que se derrumba sola en silencio cuánto bullicio hubo en sus días y cuánta noche cubre su puerta Quedan en ella aquellas tardes de verdes algas y niebla incierta de sordo viento y lluvia fina tiempo lejano de tenues verdes Quedan en ella tantas nostalgias y el desencanto de una quimera quizá una rosa desamparada siempre la magia de una presencia. * * * Matilde Albert Robatto nació en Galicia, España |
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